El campeón del Nacional de Mar del Plata 2017, Consagrados de Olavarría, tuvo un muy buen certamen en la edición de 2018, pero quedó a las puertas de un duelo histórico contra La Espiga de Glew en lo que hubiera sido un cruce entre los últimos dos campeones del Nacional. Termas Huinco de Mar del Plata se impuso en el camino y eliminó a los olavarrienses en semifinales en un duelo que el aurinegro ganaba 3-1 con mucha contundencia.

“Nos merecemos esa final contra La Espiga, queremos jugar contra el mejor”, aclaró este martes el director técnico de Consagrados, Javier Lobos, luego de hacer un repaso por la enorme cantidad de títulos conseguidos por el elenco que fusionó a los dos mejores equipos de fútbol 5 de Olavarría, Los Más Solos y 7 de Oro. El DT es un analista puro del fútbol amateur, que sabe todo el potencial de su equipo a la vez que reconoce toda la envergadura de sus rivales. En su mente ya está el Nacional de marzo, y luego de quedar eliminados en cuartos y en semis en las últimas dos Copas se resigna a regalar un metro de ventaja.

En julio, Consagrados arribó al Complejo Punto Sur con todos los grandes recuerdos que le traía ese sintético de cuando dieron la vuelta olímpica luego de vencer 2-1 a Estrella Junior de Rosario en la final del 2017 (video). En el debut, le ganaron en un partido de alto vuelo a Albinoleffe de Longchamps (3-1), en un cotejo que enfrentó a los que serían dos de los cuatro mejores equipos del fin de semana.

Julio “Pipo” Crispin, el Ortigoza que tienen los de Olavarría, fue la figura del encuentro inicial y así analizó los primeros porotos conseguidos: “Fue trabado y parejo, podría haber ganado cualquiera de los dos, pero tuvimos suerte y concretamos las que tuvimos”, arrancó. El mediocampista de gran manejo y versatilidad, siempre aclarando que para él el Nacional es “espectacular” y no hay otro torneo como este, tuvo la compañía de su señora y su hija, lo que quizás le dio un plus en la ciudad “Feliz”. Por otra parte, subrayó el hecho de conocer la cancha y valoró el juego por abajo de su equipo.

En el turno siguiente, Consagrados apabulló 7-1 a Salchichas de Rauch y volvió a sacar la chapa de candidato de cara a la fase eliminatoria. En cuartos de final, los capitaneados por Carlitos González se cruzaron con La “V” Corta de Ayacucho, que por cercanía geográfica y experiencias en Nacionales se vivía como un clásico colorido de la región. Para Lobos, el diferencial para ganar estos partidos está “antes que nada en armarte bien abajo, con un arquero confiable y una defensa segura”. Así fue que su elenco mantuvo bien la intensidad del partido y se impuso por 2-0 en un duelo muy pasional.

Luego de reconocer la importancia de meterse en las semifinales de un torneo de tan buen nivel, el entrenador recalcó lo siguiente: “Hay que saber que por el nombre sólo no vas a llegar, que desde lo físico los partidos son cada vez más intensos y que hay que llegar muy enteros. Nacional a Nacional los equipos vienen mucho más preparados y en sus ciudades son tan campeones como lo somos nosotros en Olavarría”, reflexionó.

Tras sostener que la pelota de doble pique no lo favorece para nada y que los nervios de saber que un mínimo error en este tipo de torneos te deja afuera, Lobos hizo un breve análisis de los otros tres elencos que arribaron a las semifinales. “A Termas Huinco no lo conozco mucho, pero es un equipo muy aguerrido, muy práctico, que intenta jugar y se cierra bien. Albinoleffe es un conjunto muy rápido, de mucho dominio de pelota, mientras que La Espiga tiene una calidad de jugadores excepcionales, aún sin Erick Aparicio –figura del Nacional de Tandil-”, cerró.

Por último, el exitoso, pasional y detallista director técnico, fue cauto a la hora de imaginarse como campeón, algo que anhelaba como pocos en esta movida: “Quedan cuatro equipos y sabemos que los que llegaron por algo están ahí, por lo tanto el que gane seguramente sea merecido”.

Horas después, su equipo desplegó un primer tiempo de fútbol total, con presión alta, mucha intensidad, manejo de pelota en el mediocampo y sin grandes problemas en defensa. Con Diego Puertas picante en ataque, y tres volantes de primer nivel como Emilio Peralta, “Pato” González y “Pipo” Crispin, Consagrados se llevaba puesto a Termas y descansaba en el entretiempo con dos goles de ventaja. Pero el equipo local sacó fuerzas de donde no tenía y con una estupenda actuación de Ángel Filtre, llevó el encuentro a los penales (3-3). Allí, con ánimos dispares y algo parecido a lo que había pasado en cuartos de final con Caravana Mágica y Albinoleffe, el equipo que remontó el partido se llevó la serie en los penales: Termas, con Rando como héroe, le quitó la ilusión a Consagrados de disputar esa final que tanto quería. Y que tanto sueña ahora, en la previa de un nuevo Nacional de Campeones que como siempre crecerá en nivel y expectativas.

¿Serán los olavarrienses capaces de cortar la hegemonía de los de Glew…?

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